El periódico Catholic News Agency reportó que el grupo abortista “Uplift International” lanzó este mes el programa piloto “Pharmacist Abortion Access Project” (en español, “Proyecto de Acceso al Aborto para Farmacéuticos”) en el estado de Washington. El objetivo de esta perversa iniciativa es entrenar a los farmacéuticos para prescribir mifepristona y misoprostol a las mujeres que quieran abortar. En esta primera fase, las pastillas se distribuyen a través de la farmacia virtual “Honeybee Health”, pero próximamente será expandido para incluir farmacias físicas también.
La organización provida “Students for Life Action” ha señalado los grandes peligros que entraña este programa para la salud de las mujeres, pues no exige que se realicen análisis sanguíneos ni ultrasonidos para verificar la edad del bebé no nacido antes de administrar las píldoras. Además, existe el riesgo de que los abusadores puedan conseguir fácilmente píldoras abortivas y administrárselas a mujeres embarazadas sin su consentimiento (o incluso sin su conocimiento).